Hoy en El Respeto hablamos con Damien Texier, responsable de varias misiones científicas en la Agencia Espacial Europea; entre ellas la misión “Planck”, que ha tomado la “foto” más antigua posible del universo (los vestigios del big-bang) y la misión “LISA Pathfinder”, que está probando en la actualidad la tecnología necesaria para detectar las ondas gravitatorias en el espacio.
En 1916 Albert Einstein ya predijo la existencia de dichas ondas, pero pensó que no sería posible detectarlas…se equivocó.
El 14 de septiembre de 2015, dos detectores idénticos, situados uno a 3.000 kilómetros del otro, las captaron. Todo fue gracias a LIGO (Observatorio de Interferometría Láser de Ondas Gravitacionales), un gran instrumento óptico que puede identificar variaciones equivalentes a una diezmilésima parte del diámetro de un átomo, la medición más precisa jamás lograda por un instrumento científico.
La señal venía de una fusión que sucedió hace 1.300 millones de años y consistió en el violento abrazo de dos agujeros negros cuya masa es entre 29 y 36 veces mayor a la del Sol. Los dos agujeros se fundieron en uno liberando una energía equivalente a tres masas solares, que salió despedida en forma de ondas gravitacionales en una fracción de segundo. Y todo este proceso de masa transformándose en energía en fracciones de segundo lo describe a la perfección la ecuación más famosa del mundo E=mc2 [La energía es igual a la masa por la velocidad de la luz al cuadrado].
La Agencia Espacial Europea (ESA) tiene planes para construir un gran interferómetro con tres satélites formando un triángulo equilátero de un millón de kilómetros de lado y el uso de radiación láser. «La idea es medir pequeñas variaciones en la longitud de los haces láser causadas por el paso de las ondas gravitacionales” nos contaba Damien Texier… y tras sólo dos meses de operaciones científicas, los resultados muestran que los dos cubos alojados en la nave se encuentran en caída libre, bajo la influencia exclusiva de la gravedad y sin someterse a otras fuerzas externas, con una precisión más de cinco veces mayor de lo exigido inicialmente.
Hablamos con Damien sobre los secretos sobre la misión, sobre cómo un equipo formado por Airbus Defence & Spacey un consorcio de 40 empresas e institutos de investigación de 14 países europeos, se han coordinado para construir un satélite con un elevado nivel de calidad magnética y gravitatoria, sobre agujeros negros, sobre vida inteligente en el espacio….
Lisa Pathfinder ya orbita en un punto de Lagrange 1 (donde un objeto pequeño, afectado exclusivamente por la gravedad, puede mantenerse estacionario respecto a dos objetos más grandes), a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra. La demostración de las tecnologías clave de la misión abre la puerta al desarrollo de un gran observatorio espacial, capaz de detectar ondas gravitatorias procedentes de una gran variedad de objetos exóticos en el Universo, como nos dice Damien, unas maravillosas gafas de observación….